Las Islas del Canal (o Anglonormandas), un grupo de islas situadas frente a las costas francesas del canal de la Mancha, fueron el único territorio británico ocupado por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial.
El 3 de junio de 1943 un cuerpo fue expulsado por el mar en la playa de St. Queens, en Jersey, la mayor de las islas del archipiélago. El cadáver fue trasladado al hospital de Saint Helier y allí fue identificado como el sargento de la RAF Abraham Holden, observador en un Avro Lancaster derribado dos semanas antes sobre el Canal cuando regresaba de una misión de bombardeo sobre Alemania. En las horas posteriores se recibieron en el hospital decenas de coronas de flores, y por su capilla pasaron cientos de isleños para presentar sus respetos y rendir homenaje al héroe. Las autoridades de ocupación alemanas comenzaron a temer que el entierro, programado para dos días más tarde, acabase convertido en una gran demostración popular de patriotismo.
El día del entierro, el sábado 5 de junio, apareció un segundo cadáver en la playa. Fue identificado como Dennis Butlin, otro sargento tripulante de un Lancaster de la RAF. Las autoridades decidieron entonces aplazar el funeral de Holden para celebrar uno conjunto al día siguiente.
La mañana del domingo 6 de junio se celebró el funeral por los dos aviadores británicos. Centenares de personas se alinearon en la ruta de los coches fúnebres. Los soldados alemanes impidieron la entrada de la multitud al cementerio. Sin embargo, la Luftwaffe tuvo el gesto apaciguador de rendir honores militares a los dos enemigos caídos.
En esta fotografía se ve a soldados alemanes transportando a hombros uno de los ataúdes cubierto con la bandera británica:
Esto no era lo habitual, pero tampoco fue un caso único. Despedir con honores a un enemigo muerto en combate fue algo que todos los contendientes hicieron en alguna ocasión.
Depende también de quién se trataba el difunto. Al Barón Rojo lo enterraron con honores de héroe, con salvas de honor incluidas, su ataúd fue llevado por seis capitanes de la RAAF y en su tumba pusieron como epitafio "Aquí yace un valiente, un noble adversario y un verdadero hombre de honor". Saludos.
ResponderEliminarHay muchos casos. Alguno ya lo comenté en este blog:
Eliminarhttp://nonsei2gm.blogspot.com.es/2013/06/un-militar-honorable.html
Un caso llamativo fue el de un kamikaze que se estrelló contra el acorazado Missouri. El capitán del buque ordenó darle un entierro con honores militares.
Un saludo, Iakob.