Hoy leí en en el blog La escalera de Iakob una interesante entrada sobre el Síndrome del acento extranjero, una extraña enfermedad, que habitualmente se da como consecuencia de una lesión cerebral, y que causa que el afectado repentinamente comience a hablar en su lengua materna con un acento extranjero. Era un tema curioso del que yo nunca había oído hablar, pero en mi línea habitual de perder el tiempo en detalles anecdóticos sin ninguna importancia, lo que más me llamó la atención fue un dato totalmente insignificante que no me encajaba. Iakob cuenta que uno de los primeros casos conocidos es el de una joven noruega que tras resultar herida en la cabeza en un bombardeo nazi en 1941 comenzó a hablar con un fuerte acento alemán. El problema es que los alemanes habían invadido Noruega en la primavera de 1940, así que, descartando que por alguna extraña razón hubiesen decidido bombardearse a sí mismos, deduje que la lesión de la joven noruega no había sido causada por un ataque aéreo. Intrigado por semejante misterio, decidí iniciar una “profunda” investigación a base de Google. El primer resultado de la búsqueda es la inevitable Wikipedia, que en su entrada en inglés para Foreign Accent Syndrome, cuenta:
De acuerdo con la American Speech-Language-Hearing Association, uno de los primeros casos de FAS fue registrado en Kirkenes, Noruega, en 1941. Astrid L., una mujer de 35 años de edad, que sufrió una lesión grave en la cabeza por la metralla durante un ataque aéreo, adoptó misteriosamente un fuerte acento alemán después de su recuperación y fue grandemente ignorada por sus compatriotas noruegos.
No es que me matase a buscar, pero en el resto de páginas que vi en las que se hablaba del caso de Astrid L. se decía más o menos esto mismo. Una explicación posible es que 1941 fuese el año en el que fue tratada por primera vez de los extraños síntomas que presentaba, y por tanto el año en el que se registró su caso, pero que que la lesión hubiese sido anterior. Eso se descarta por lo que se cuenta en el libro Classics cases in neuropsychology: Astrid L. fue tratada de una lesión en la región fronto-parietal del hemisferio izquierdo por el doctor Georg Monrad-Krohn, un profesor de medicina especialista en neurología. El propio Monrad-Krohn afirmó que la examinó por primera vez en 1943, “dos años después de la lesión”. Es decir, que sí fue herida en 1941 (¿en un bombardeo británico, tal vez?).
Entró en el hospital sin ningún tipo de cojera y hablando con fluidez, pero con un acento extraño, que a mí me pareció alemán o francés. Se quejaba amargamente de que en las tiendas constantemente la tomaban por una alemana, y que los dependientes se negaban a venderle nada. Hay que tener en cuenta el odio se que había desarrollado después del ataque alemán y la ocupación sin previa declaración de guerra, acentuado aún más por las atrocidades de la Gestapo... Nunca había salido de Noruega, y nunca se había relacionado con extranjeros...
En realidad el acento alemán de Astrid L. no era tal. Ella hablaba noruego, pero debido a su lesión neuronal cometía errores y mezclas gramaticales, y su pronunciación era distinta a la de los acentos nativos noruegos. Para cualquier compatriota suyo que la escuchase, ella tenía un acento extranjero. Que la tomasen por alemana, se debía sobre todo a los parecidos que había en la pronunciación entre los dos idiomas, más que a las diferencias.
En resumen, habría sido la victoria definitiva de Göring, si, tras un ataque de la Luftwaffe, los bombardeados salían de entre los escombros hablando como si hubiesen nacido en Düsseldorf, pero me temo que no es más que un añadido que alguien se inventó para adornar la historia de Astrid L.
Aunque esto es solo una suposición. No hay manera de saber qué le ocurrió realmente a la pobre Astrid, si ni siquiera conocemos su nombre real (maldita confidencialidad médico-paciente...).
Yo tampoco he podido encontrar más datos sobre Astrid; todas las referencias de que dispongo dicen más o menos lo mismo, se limitan a hablar de "un ataque aéreo alemán en 1941". Quizá se trate solamente de un error de fechas o puede que, como tu bien apuntas, fuese víctima de un ataque aliado que luego, por aquello de no dejar mal a los "buenos", cambiasen atribuyéndoselo a los nazis. Como sea, gracias por haberte molestado en investigar el caso. Saludos, :)
ResponderEliminarBueno, tampoco creo que haya ningún interés especial en cargar con la culpa a los nazis. Simplemente alguien pensaría que el detalle del ataque aéreo quedaría bien en esta historia, sin fijarse en que las fechas no encajaban.
EliminarUn saludo, Iakob.
Realmente curioso.
ResponderEliminarEntonces Aznar, cuando se puso a hablar en "vaquero" ("Hemos estado trabajandoooo..."), fue debido a un golpe que se dio en la cabeza. Ya decía yo.
Un saludo.
Yo pensé lo mismo. De repente entendí muchas cosas.
EliminarUn saludo, Cayetano.
¡Que curioso! Esto me ha recordado otro "efecto" curioso, en este caso con la memoria ante escenas y tiempos horrorosos. Lo leí en el blog de la germanista Rosa sala Rose: http://rosasalarose.blogspot.com.es/2009/11/historia-y-memoria-i.html
ResponderEliminarGracias por el enlace. Es muy interesante.
EliminarYo también me he encontrado con gente que le da mucho más valor al relato de un testigo que a una investigación histórica. Y no solo la memoria es traicionera, sino que al final creemos lo que queremos creer. Si lo que cuenta el testigo encaja con la idea que tenemos nosotros, lo creeremos sin problemas. Si no, sí que tendremos dudas.
Un saludo, y gracias por el comentario.
¡Hola, Nonsei! Tus dudas sobre la contradicción en las fechas del bombardeo del que fue víctima la pobre Astrid son más que razonables. Creo que he encontrado la solución. Tras buscar un poco he dado con una revista médica que nos proporciona la fecha: Astrid L. sufrió su herida de metralla en Oslo el 6 de septiembre de 1941. Sabida la fecha, el resto resulta fácil: todo apunta a que le afectó el bombardeo al que una de las "fortalezas voladoras" británicas sometió al puerto de Oslo la mañana de ese mismo día (ver enlace). Has hecho muy bien en dudar: la mayoría de las fuentes dan por hecho que se trató de un bombardeo alemán. Un cordial saludo y felicidades por tu blog. http://trove.nla.gov.au/ndp/del/article/95138537?searchTerm=air%20raid%20Oslo&searchLimits=
ResponderEliminarHola.
EliminarMuchísimas gracias por haberte molestado en buscar la información y por compartirla en este blog. Ahora ya queda aclarada la duda: Astrid L. fue herida en un ataque aéreo británico.
Un saludo.