Un incómodo campeón olímpico

En 1936 Japón se presentaba a los Juegos Olímpicos de Berlín como una de las grandes potencias deportivas del mundo. Ya en 1932 en Los Ángeles los japoneses habían quedado quintos en el medallero, por delante de otros países con gran tradición deportiva, como los británicos. Eran, junto a los estadounidenses, los grandes dominadores de la natación mundial. Y en Berlín los nadadores japoneses cumplieron con las expectativas. También lo hizo sobradamente otra de sus opciones de medalla, el plusmarquista mundial de maratón Kitei Son. Aprovechando una “pájara” del gran favorito, el argentino Juan Carlos Zabala, Son se hizo con la medalla de oro, con un fenomenal tiempo de 2h29'12'' (era la primera vez que se bajaba de las dos horas y media en una maratón olímpica). Y no quedó ahí la cosa. Su compatriota Shoryu Nan lograba la medalla de bronce, entrando en la meta en tercer lugar detrás del británico Ernie Harper.

Kitei Son entra victorioso en la meta de la maratón de Berlín:


Aquellas dos medallas en la maratón olímpica de 1936 fueron motivo de orgullo para Japón, pero mucho más para otro país que no había podido tener representación propia en los Juegos. Y es que Kitei Son y Shoryu Nan eran en realidad las pronunciaciones japonesas de dos nombres coreanos, Sohn Kee-chung y Nam Sung-yong.

Desde la anexión japonesa de Corea en 1910, los coreanos pasaron a ser ciudadanos de segunda no solo en el conjunto del Imperio Japonés, sino incluso dentro de su propio país. Los movimientos nacionalistas eran duramente reprimidos. El gobierno de Japón puso en marcha una política de asimilación cultural que trataba de eliminar los signos de identidad coreanos e imponer por la fuerza el idioma, los nombres, las costumbres o las vestimentas de los colonizadores.

Los deportistas coreanos solo podían acudir a los Juegos Olímpicos bajo la bandera de Japón. Además se vieron obligados a inscribirse con las versiones japonesas de sus nombres. Pero con lo que no contaban los políticos japoneses era con que pudiesen aprovechar sus éxitos deportivos para reivindicar su nacionalidad y dar a conocer ante todo el mundo la resistencia de Corea a la ocupación japonesa. Y eso fue lo que hicieron. Cuando subieron al podium a recibir sus medallas, Sohn Kee-chung y Nam Sung-yong mantuvieron la cabeza agachada para no mirar la bandera de Japón:


En las entrevistas posteriores utilizaron sus nombres coreanos, aprovechando para dejar claro que ellos eran coreanos, no japoneses. Su comportamiento reivindicativo les condenó al ostracismo a su regreso de los Juegos, al tiempo que les convertía en unos héroes nacionales en Corea. Cuando el periódico coreano Dong-a Ilbo, uno de los más importantes del país, informó de la victoria de Sohn, lo hizo con una imagen en portada del corredor en el podium. La foto había sido retocada para eliminar la bandera de Japón de su chándal:


La fotografía enfureció a Minami Jiro, el Gobernador General de Corea. La policía militar irrumpió en el diario, ocho de sus trabajadores fueron encarcelados y se suspendió su publicación durante nueve meses.

Sohn Kee-chung fue el abanderado de Corea del Sur en las Olimpiadas de Londres de 1948, las primeras en las que participó Corea como estado independiente. Durante décadas se dedicó a entrenar a varias generaciones de grandes maratonistas surcoreanos. En 1988 recibió el mayor honor de su vida cuando fue designado para ser el relevista que entrase con la antorcha olímpica en el estadio durante la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Seúl:


Durante mucho tiempo Corea del Sur ha estado reclamando al Comité Olímpico Internacional que le sean reconocidas las medallas de Sohn Kee-chung y Nam Sung-yong (en realidad Sohn nació en 1914 en lo que hoy es Corea del Norte, aunque desde el final de la guerra vivió en el Sur), pero oficialmente ambas siguen figurando en el medallero como medallas japonesas.

Fuentes:
http://www.eurowon.com/2011/10/sohn-kee-chung-la-gran-leyenda-del.html
http://en.wikipedia.org/wiki/Sohn_Kee-chung
http://en.wikipedia.org/wiki/Nam_Sung-yong
http://www.maraton.es/gloria-olimpica-x-kitei-son/


3 comentarios:

  1. caso similar en españa?

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  2. El otro día me contaron el origen de las leyes de Murphy, que aprece ser era una aviador de la IIGM, y me pareció muy curiosa. Si no la sabes, anótatela pendiente de descubrir, o eso o ya te la contaría yo.

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  3. Ya vi la historia que te contaron, Canichu. Cuando me nombras en el facebook me aparece un aviso en las notificaciones.

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